-

Nunca dejes que nadie te diga que no puedes hacer algo, ni siquiera yo, ¿vale? Si tienes un sueño tienes que protegerlo. Las personas que no son capaces de hacer algo te dirán que tú tampoco puedes. Si quieres algo, ve a por ello y punto.

martes, 20 de diciembre de 2011

Sólo una mirada ilusionada.

Hoy me han hecho reflexionar. A veces es increíble cómo las pequeñas cosas son capaces de cambiar totalmente un día. Un simple gesto, una palabra, una sonrisa, o, en mi caso... una mirada. Después de un día intenso en el que terminas cansada de estar siempre haciendo lo mismo, cansada de estar siempre rodeada de las mismas situaciones, de las mismas formas de pensar, y de todo lo demás... después de estar buscando durante mucho tiempo la forma de despertar tu interés, por fin la encuentras y todo te parece maravilloso. El mundo se tiñe de todos los colores posibles, y, aunque parezca una tontería, todo quiere comenzar a cobrar sentido; todo se empeña en parecerte mejor y estás deseando que termine el día para ir a ése sitio, aunque no te guste lo que haces, aunque estés cansada, sudorosa y harta, siempre lo buscas. Siempre recorre mi mirada el mismo espacio amplio y gris, siempre en busca de ésa mirada correspondida que raras veces lo es, pero cuando lo es... es una sensación completamente inexplicable. Porque puede que su mirada no transmita nada, ningún sentimiento; pero es capaz de implantar en mí un sinfín de sensaciones totalmente contradictorias. Ésa inseguridad al pensarlo, ésa necesidad de saber si me estará mirando realmente a mí es torturadora, pero merece la pena. Cuando las miradas se cruzan es algo increíble, sobrenatural, totalmente indescriptible. Y ni siquiera sé su nombre, no sé nada de su vida, ni de lo que pasa por su mente, ni su edad, ni siquiera sus gustos, no sé nada, sólo sé cómo es su mirada. Sé cómo mira, sé lo que es capaz de hacerme sólo con una mirada; es capaz de descolocarme y de paralizarme. Sin embargo, la sigo buscando. La sigo buscando como si fuese un rayito de luz esperanzadora en todo el tormento del día. Y aunque esté cansada, siempre encuentro mi motivación al final del día que me hace volver a casa con una sensación de incomodidez totalmente desconocida para mí. Me gustaría saber lo que me está pasando. Me gustaría que todo se desarrollase mucho más deprisa.

Follow me on Twitter ♥
Ask me in FormSpring :D

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nubes de papel.